And welcome to summer

Mi intención no es la de alarmar a nadie con el título de esta primera entrada; no escribiré en inglés. Me presentaré: me llamo Miguel Rodríguez, tengo 19 años y soy estudiante de 2º de Economía en la Universidad Pompeu Fabra, en Barcelona -aunque nací en Palma de Mallorca-, además de árbitro de básquet, músico por afición, y muchas más cosas que ya contaré a alguien si es que le interesan. Rondaba por mi cabeza la idea de hacer un blog desde hacía tiempo, probablemente sintiendo una falsa inspiración provocada por la lucidez que te da la ingente cantidad de cafeína que toma un estudiante en época de exámenes. Bromas aparte...

Este blog no pretende salvar el mundo. O sí, pero a su manera. Mejor dicho, no estoy muy seguro. Supongo que son cosas que se van viendo con el tiempo. Y más ahora que ha empezado el verano, al menos para mí, después del último examen. Y no, no me esperan las islas Seychelles en estas vacaciones, pero sí un montón de propósitos y despropósitos, entre ellos sacarme la teórica del carnet de conducir.

Aquí dejo unas cuantas preguntas sin respuesta que intentaré resolver a medida que vaya posteando en mi blog, que espero que sigáis con tanta frecuencia como con la que yo intentaré escribir.

1. ¿Por qué cojones cantan los españoles como los sudamericanos?
2. ¿Por qué siguen tirando petardos si ya ha pasado una semana de Sant Joan?
3. ¿Por qué disfrutan tanto los profesores poniendo exámenes tan difíciles?
4. ¿Por qué no aprenderemos nunca que la selección española no pasará nunca de cuartos?
5. ¿Por qué nunca se me irá este dolor de cabeza?
6. ¿Por qué no se le puede quitar el sonido de "Batería baja" a un Motorola?
7. ¿Por qué está tan buena Scarlett Johansson?
8. ¿Por qué hay gente tan gilipollas?

No desesperéis; como ya he dicho, son preguntas sin respuesta, o al menos, sin una respuesta evidente. Todo llegará, amigos, todo llegará...

PD (o PP, de "Post Post"): mi mail es due_to_forgiveness@hotmail.com. Si alguien está interesado en algún tema, o simplemente quiere despotricarme, no dudéis en escribirme. Os lo agradeceré.